jueves, 2 de mayo de 2013

¡Aleja de mí este cáliz!



10 comentarios:

  1. Una toma llena de originalidad y creatividad.
    Enhorabuena y cordial saludo.
    Ramón

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  2. Muchas gracias, Ramón. Un placer tenerte por aquí. Un abrazo.

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  3. Cómo beber de esa bebida amarga,
    tragar dolor, engullir servidumbre...
    Una composición que me parece muy cuidada y equlibrada. Buen contraste de líneas y tonos.
    Un abrazo

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    1. Sí. Todo es hacernos creer que nos dan de beber miel, cuando en realidad es agenjo. Gracias, Alfredo, y un abrazo.

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  4. Pues a mi me produce cierta violencia y no sólo por la tensión de las líneas, que también, si no por los contrastes del blanco y negro y esas especies de patas de araña que hay en la base, amenazantes sobre esa rosa.

    Enhorabuena Carlos.

    Buen fin de semana.

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    1. Quizá en la versión en color, donde los verdes de las hojas de palmera enfilan hacia el tulipán, con los colores de nuestra bandera, suavizaría esas emociones. También es posible que hasta modificase el significado de la misma fotografía. Las patas de araña son sombras, evidentemente. Y las sombras siempre despiertan la imaginación. Un abrazo, Chapi, y gracias por tus comentarios.

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  5. Dura, a mi me parece dura por lo que de velocidad, prisa, y espacio abismal tiene pero, joer... como me gusta.
    Un abrazo Carlos

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    1. Vale el comentario para Chapiniki. Es la dureza del blanco y negro, por eso me gusta utilizarlo. Es como si despojara a la realidad de emociones para dejarnos solo su crudeza. Un abrazo, Luis.

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  6. Vaya juego geométrico has conseguido con esta abstracción, desde luego uno no sabe qué es lo que está observando y si lo observado proviene de la mente y la técnica de alguien empecinado en desvirtuar lo real para ofrecernos algo de su propia invención, en cualquier caso el resultado me parece visualmente interesante aunque quizás esa rosa parece un añadido bastante evidente, asumiendo que mi percepción evidentemente me pueda engañar.

    Un abrazo.

    Un abrazo.

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    1. Más que desvirtuar la realidad he pretendido, en este caso, acentuar unas formas que se daban en esas hojas y que me traían a la cabeza una especie de esperanza rota, esperanza por el verde y rota por esas líneas que se disparaban hacia el fondo. Sólo me faltaba poner en ese fondo un futuro precioso que nos están pintando. Voy a subir una variación, en sus colores originales, pero con ese cáliz más lejano. Creo que así gana bastante. Un abrazo.

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